Repaso a la actualidad ciclista (II): Semiclásicas italianas, aperitivo para Lombardía

Durante esta semana se han disputado en suelo italiano la Coppa Sabatini y el Giro dell Emilia, dos carreras que sirven de puesta a punto para la última gran carrera de la temporada, el Giro de Lombardía.

Comenzamos el resumen con la Coppa Sabatini, la prueba de menor categoría de las dos, aunque entre los vencedores de los últimos años nos encontraremos con figuras de la talla de Paolo Bettini (2002), Jan Ullrich (2004) o Philippe Gilbert (2009), que decidió no participar en esta edición para descansar y recuperarse del duro esfuerzo (jet-lag incluido por el viaje a Australia) del Mundial.

La victoria se la llevó Riccardo Riccó, en lo que supone su primera victoria con los colores del Vacansoleil. Pequeña alegría para el corredor italiano, que esta semana veía como se disparaban rumores sobre la incautación de productos sospechosos tras un registro en su domicilio. Segundo fue su compañero de equipo Marco Marcato, que tras lanzar a la perfección a Riccó aún tuvo fuerzas para terminar tras su líder. Gran doblete para Vacansoleil, que realizó un gran trabajo durante toda la carrera, especialmente con Alberto Ongarato y Johnny Hoogerland, que controlaron la carrera a la perfección durante los diez últimos kilómetros. El podium lo completó el también italiano Leonardo Bertagnolli.



Riccó y Marcato celebran el doblete de Vacansoleil



Turno ahora para el Giro dell Emilia, disputada ayer sábado sobre un trazado de 195 kilómetros que incluye cinco ascensiones al Santuario de San Luca, con un desnivel medio del 10,8% durante casi 2000 metros, en los que la carretera discurre paralela a un precioso pórtico que cuenta con 666 arcos. En resumen, una carrera tan dura como bonita, en la que sólo pueden triunfar grandes corredores. Así lo atestigua el palmarés de la prueba, puesto que entre los últimos vencedores nos encontramos a Robert Gesink (2009), Danilo Di Luca (2008), Frank Schleck (2007), Davide Rebellin (2006)...

Pórtico de San Luca

Este año la victoria ha sido para Robert Gesink, que de esta manera reedita su triunfo de la edición anterior. Gran triunfo para el holandés, que está cuajando un final de temporada fantástico y se postula como uno de los máximos favoritos para el Giro de Lombardía.

La carrera, como era de preveer, se hizo muy dura. Después del penúltimo paso por San Luca, a unos 10 kilómetros de la llegada, marchaban por delante Jakob Fulgsang, muy fuerte en este último mes, y el incansable Johnny Hoogerland, que ya había estado en un corte anterior con Óscar Pujol y Giampaolo Caruso entre otros. En su persecución se formó un grupo con 12 corredores, los más fuertes de la prueba, donde destacaba la presencia de tres corredores del Colnago, Domenico Pozzovivo (su jefe de filas) y sus dos compañeros, Giorgio Brambilla y Simone Stortoni, que habían estado en el grupo de Hoogerland y que lograron aguantar con los grandes favoritos. Gracias al trabajo de los dos jóvenes italianos, la aventura de Fuglsang y Hoogerland acabó a 6 kms de meta.

En la última subida, Daniel Martin fue el primero en abrir las hostilidades, mostrando la debilidad de Riccardo Riccó. Se llevó a su rueda a Alexander Kolobnev, Michele Scarponi y Robert Gesink, mientras que Vincenzo Nibali, el flamante vencedor de la Vuelta a España, sufría para lograr conectar. Otro arreón de Daniel Martin eliminó definitivamente a Kolobnev. El irlandés parecía el más fuerte, pero en el sprint Robert Gesink arrancó con una fuerza brutal para sellar su victoria. Martin, Scarponi, Kolobnev y Nibali, en este orden, completaron los cinco primeros puestos.